Si tu empresa se encuentra en el sector de distribución, sin duda entenderás que existe una gran relación entre el inventario y la gestión de un almacén con los resultados que obtienes. En las empresas pequeñas y medianas de este sector, el impacto llega a cada aspecto del negocio.
La gestión del inventario es un acto de equilibrio y, aunque no existe una respuesta perfecta para su manejo, existen sistemas de control de inventario que te pueden asistir con dificultades técnicas comunes en casi todas las empresas. A continuación, te mencionamos algunos.
1. Obtén un conteo exacto y una valoración precisa de tu stock
Sin una evaluación exacta de los niveles de tu stock, cualquier planeación de compra o previsión de inventario es una pérdida de tiempo. Un buen sistema de control de inventario te debe proveer diferentes herramientas para llevar tu conteo: conteos cíclicos, generación de comprobantes, ubicaciones del almacén y envíos, entre otras.
2. Planea las compras
Si estás intentando planear tus compras de forma manual, con hojas de cálculo, debes recordar que existen mejores formas. Tener a la mano un sistema con la posibilidad de generar listas de materiales es una de ellas, lo que te permitirá hacer cálculos complicados como volumen mínimo de pedido, niveles mínimos y máximos de stock, tolerancia en los tiempos de entrega, predicción de demandas, compras cíclicas, y demanda actual, entre otros.
Un ERP tendrá en cuenta todos estos factores (y todavía más) para proveerte el mejor pronóstico y sugerirte cómo planear tus compras. Además, este pronóstico se puede adaptar a la temporada o utilizar algoritmos complejos formulados con base en el historial de ventas.
3. Expide órdenes
No importa qué tan buen sistema de gestión de inventarios tengas, en algún momento expedirás órdenes para un cliente o recibirás de un proveedor. Asegúrate de que tus mecanismos acomodan los requerimientos para los pedidos, incluyendo el transporte o los proveedores que utilizarás.
4. Ofrece opciones
Si un cliente te habla y te pide un producto que no tienes, debes poder consultar tu inventario inmediatamente para ofrecerle alternativas a su pedido, ya sea una marca diferente o el mismo producto pero en diferente cantidad por paquete.
5. “Dame mi orden usual”
¿Qué harías si uno de tus clientes te marca y te dice: “dame lo de siempre”? ¿Sabrías qué es lo que te está pidiendo? Una de las ventajas de contar con un ERP es que puedes acceder a esta información rápidamente, e incluso desde tu celular, si tu elección cuenta con una aplicación móvil. Así podrás satisfacer a tus clientes de forma rápida y sencilla.
6. Mide y mejora
Las métricas y los análisis, expuestos en reportes, son críticos para llevar un buen control del almacén y el inventario. Algunos de estos reportes pueden ser tan simples como mostrar los niveles de inventario, las órdenes de compra abiertas y los movimientos del stock. Otros pueden llegar a ser más complicados y, para ello, es necesario contar con un buen sistema de control de inventarios que cuente con la posibilidad de generarlos.
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